Aplicaciones personales de los Cuencos Tibetanos

Automasajes sobre órganos y sus Chakras.

Acuéstate sobre tu espalda, respira profundamente tres veces y trata de estar lo más relajado posible. Coloca un cuenco con un sonido profundo sobre tu pelvis, que apoye sobre el hueso púbico, la zona del Chakra Raiz. Respira tranquilamente desde el estómago. Haz sonar el cuenco con un mazo de fieltro y siente cómo las vibraciones pasan por tu cuerpo.

Luego puedes ir subiendo al 2do chakra por debajo del ombligo, es una zona blanda, por tal razón el sonido puede ser menos potente ya que son las partes duras como los huesos que resaltan el sonido y lo transmiten con mayor profundidad y fuerza.

Entonces, podrás ir subiendo pasando por el Plexo Solar hasta el Chakra del Corazón. Los tonos más graves generalmente funcionan mejor en los chakras inferiores, mientras que los tonos más agudos van bien con los chakras superiores. Permanece acostado durante algún tiempo y disfruta de los sonidos y las vibraciones que ha sentido. Luego regresa aquí y ahora.

Antiestrés Express

El Sonido de los cuencos de gran tamaño tiene la capacidad de eliminar el estrés de forma rápida y eficaz. El modo de hacerlo es el siguiente: se llena de agua el cuenco hasta casi el borde. Damos varios golpes seguidos, y a continuación introducimos una mano y la dejamos dentro del agua, sintiendo cómo esta vibración pasa hacia el resto del organismo; seguidamente repetimos la misma operación con la otra mano, e incluso podemos repetir el mismo ritual con los pies. Es una Terapia antiestrés muy rápida y eficaz.

Los Cuencos de gran dimensión, de 30 cm o incluso mayores, tienen una doble capacidad: por un lado su sonido y uso nos vincula con el Chakra de la Tierra, estimulando los chakras de la planta de los pies para que estemos centrados sobre la Tierra en el momento presente, el aquí y ahora; y por otro, su Sonido tiene la capacidad de equilibrar y armonizar el sistema energético de doce chakras, o sea, los físicos y los que están en el Aura.

Para relajarse y dormir.

Al irnos a dormir, al acostarnos, podemos poner un Cuenco a la altura del Corazón e ir tocandolo con la baqueta esperando que el sonido se apague por completo antes de golpearlo nuevamente, así sucesivamente. En mi caso, suele ayudarme a conciliar el sueño y ha habido noches que me he despertado despues de un buen rato aún con el Cuenco en esa posición…

Al despertarse

Elegir un cuenco entre 12 y 16 cm , de frecuencias más altas, que sea siempre agradable de escuchar, sentir. Y al despertarse como costumbre se puede hacer sonar con algunos toques y un momento de giro. Se podrá apreciar un despertar más eficiente, despojándose de las energías muy calmas del sueño.